Very Vanila Vegan Cake versión sin gluten
A la receta del Very Vanila Vegan Cake le tengo un cariño enorme, fue mi primera preparación repostera en el nuevo mundo de las alergias alimentarias. El próximo 7 de julio se cumplen 10 años desde la primera vez que la preparé.
Al reaparecer la alergia al trigo, hace año y medio atrás, tuve que aprender a cocinar cosas dulces sin trigo, que es casi lo mismo que sin gluten. No es llegar y reemplazar el trigo por arroz en las recetas, hay algunos tips claves para que un queque siga pareciendo queque. Otra mamá con hijo con alergia alimentaria, siendo ella también alérgica alimentaria y celiaca, me enseñó un par de datos claves para hacer repostería sin gluten.
Antes de compartirles los tips, les dejo el instagram de la tienda de esta mamá. Tiene de todo para todas las alergias alimentarias, prepara tortas a pedido considerando las restricciones de alimentos, hace empanadas, sopaipillas, huevitos de chocolate… pase por su tiendita virtual _exceptogluten_ o física, Av. Grecia 3234 Macul.
Los tips
- 2 tazas de harina de trigo se sustituye por 1 taza y 1/2 de harina de arroz y 1/2 de almidón de mandioca.
- No es lo mismo almidón de papa, almidón de maíz, almidón de mandioca. La textura que aporta cada uno es distinta. Yo he probado papa y mandioca, y prefiero este último.
- Si pueden usar huevo, úsenlo, mejora mucho la esponjosidad de la masa.
- La masa debe quedar más aguada, no cremosa como un queque tradicional.
- El tiempo de cocción varía, a veces demora un poco más. La primera vez que preparen una receta hay que estar atentos al horno.
- Una vez frío el queque, yo lo guardo en una lata o envuelvo con una bolsa, pues la masa hecha con harina de arroz se reseca rápido.
Quequitos de harina de arroz y almendra
Desde que Pipe dio positivo a alergia al trigo, he empezado a incursionar en la repostería gluten free, aprender del equilibrio de las mezclas de harinas y almidones, y de las proporciones de humedad. Experimentar (a propósito o no) en la repostería se me da bastante bien, y así fue como surgieron estos quequitos… se me pasó la mano con el agua, se me olvidó el huevo y en el camino se me ocurrió ponerle harina de almendra.
Iba a hacer mi receta base de queque Very Vanilla Vegan Cake, pero sin gluten. Me gusta agregar un huevo, porque la masa sin gluten queda más esponjosa y desmigaja menos, pero se me olvidó y no quedó mal la textura a decir verdad. La receta la escribiré como la hice finalmente, pero si deciden usar el huevo quiten 1/2 taza de agua.
Quequitos de arroz y almendra
- 1 taza de harina de arroz
- 1/2 taza de almidón de mandioca
- 1/2 taza de harina de almendra
- 1 taza de azúcar
- 2 cucharitas de polvos de hornear o 1 de cremor tártaro más 1/2 de bicarbonato y una pizca de sal
- 1/2 taza aceite
- 1 taza de agua
- 1 cucharada de escencia de vainilla
- 1 cucharada de vinagre
Mezclar todos los ingredientes secos y aparte mezclar todos lo ingredientes líquidos. Luego juntar ambas mezclas y homogenizar bien. Verter la mezcla (queda bastante líquida) en moldecitos y poner al horno (precalentado) a 180 • C por 20 minutos aproximadamente. Si al enterrarles un palito sale seco, están listos.
La superficie de los quequitos quedó ligeramente crocante y azucarada, una delicia. La miga un poco esponjosa y el sabor, para mi gusto y el de los comensales, riquísimo.
Un clásico
Hoy reviví un clásico, y la casa se llenó de ese aroma dulce y a horneado, preparé queque de plátano, vegano por su puesto.
A esta receta le tengo cariño, aunque no me guste el plátano, pues fue la primera masa que usé para hacer mi primera torta de cumpleaños para los minialérgicos. Celebraba el cumpleaños número 3 de Felipe (2014).
Este es el link al post original donde está la receta. Cuando la preparé para Gabi, como es alérgica al maíz, cambié la maicena por chuño y los polvos de hornear por bicarbonato y cremor tártaro.
https://conviviendoconalergiaalimentaria.wordpress.com/2014/03/12/queque-vegano-de-platano/
Alérgico alimentario de visita
Hace algunas semanas Felipe invitó un compañero a la casa. Este compañero también es alérgico, y tiene más restricciones que Felipe, pero 10 años de experiencia en el rubro, da calle.
La verdad es que me sentía bacana, me peinaba con la selección de alimentos, incluso la mamá le iba a mandar una lonchera, le dije que no era necesario y confió en mí. También me sentía bacana porque al fin alguna criatura iba a disfrutar la comida que sirvo, pues mi queque, aunque rico, no es igual al queque envasado con exceso de grasa y azúcar.
Dada la nueva restricción de Felipe y las alergias del compañero, mi receta básica de queque no podía tener leche, maíz y trigo, ni azúcar refinada.
Pocos días antes estuve conversando con una chica que es celiaca y alérgica alimentaria, y me dio tips para trabajar las masas cuando no llevan harina de trigo. Tiene una tienda donde vende productos sin gluten, sin leche, sin soya y sin huevos, también tiene sus propias preparaciones: calzones rotos, sopaipillas, empanadas, panes y tortas (a pedido), pueden vitrinear todo en su instagram @_exceptogluten_
La receta original, con el cambio de ingredientes, quedó así:
2 tazas mezcla harina de arroz y chuño (2/3 harina de arroz, 1/3 chuño)
1 taza panela
2 huevos
1 cucharadita bicarbonato
1 cucharada vinagre
4 cucharadas aceite
1/4 taza de agua
Batir las claras a nieve, agregar yemas, aceite, vinagre, azúcar.
Añadir mezcla de harina y bicarbonato. Incorporar bien.
La masa debe quedar más líquida que la tradicional.
Hornear por 10 minutos si son quequitos individuales, demoran menos que la masa tradicional, hay que estar ojo. Yo les puse el mismo tiempo de siempre y se me tostaron un poco.
La masa del queque hecho quedó esponjosa, no se desmigajaba y solo un poco más seca que uno tradicional. Lo que sí, al día siguiente se habían resecado mucho, pero nada que una cucharada grande de mermelada no pudiera arreglar. Los alérgicos lo encontraron delicioso, solo con eso soy feliz.
La segunda parte del menú eran mini pizzetas: galletas de arroz (de esas redondas grandes), salsa de tomate, queso vegano, orégano y aceitunas. Esas también volaron (no alcanzó para foto), incluso pidieron repetición.
Conviviendo con alergia alimentaria 
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